“Jim Halpert” (John Krasinski) y “Pam Beesly” (Jenna Fischer) tenían todo para tener una boda correcta: habían organizado una ceremonia religiosa, una recepción en un hotel e invitado a toda su familia, amigos y compañeros de oficina.
Sin embargo, las cosas no avanzan como hubieran esperado: “Jim” revela el embarazo de “Pam” a su conservadora abuela (Peggy Stewart); “Andy” se lastima el escroto mientras muestra sus habilidades de baile frente a sus compañeros de oficina y el vestido de “Pam” sufre un desperfecto que pone en riesgo el día más importante de su vida.
Lo que sigue es uno de los mejores y más encantadores capítulos de The Office lleno de actos de amor, bailes sorpresa y la consumación de una pareja que debió haber llegado al altar en el momento en que se conocieron.